Ojén - Compromiso con el enduro


  
Era una mañana cualquiera de un día cualquiera, cuando recibo una llamada por el teléfono móvil. Era Antonio "Fruit Boy":
      - Antonio: Raúl! Este fin de semana nos vamos a Ojén, para reconocer el circuito del Campeonato de Andalucía. Te vienes?

      - Yo: Espera. Tengo que mirar mi agenda. Luego te confirmo (Evidentemente, ni llevaba agenda, ni estaba tan ocupado).

Horas después de "hacerme el interesante", le confirmo que sí. Cómo no voy a ir??? Si estaba en mi calendario de visitas obligadas, ya que nunca tuve la ocasión de hacer alguna ruta por una de las zonas más famosas y conocidas de Andalucía para los amantes del mtb y el enduro en particular! 

Cuando nuestros amigos de Málaga, Beni, Josepe y compañía, nos hicieron aquella visita a Córdoba, les prometí que les devolvería dicha visita y, a ser posible, en Ojén. Así que me puse en contacto con el Beni para contarle nuestro plan, a lo que él me contestó que, casualmente, también tenían previsto hacer el recorrido del Campeonato de Andalucía de Enduro BTT (EAC).
Las nubes amenazaban con mojar el día desde el principio pero, al final, el tiempo nos respetó

Dicho y hecho. Dos días después estábamos de camino a la Villa de Ojén. Salimos del parking que se sitúa en la parte baja del pueblo, callejeando un poco por sus calles, y parando previamente en la Fuente de los Chorros para que algunos puedan rellenar de agua sus botes y mochilas.

El primer enlace sale del pueblo a través de unos largos kilómetros por carretera hasta que nos adentramos por una empinada pista. Al llegar al inicio del primer tramo cronometrado, TC1 (Majalecha), nos encontramos con Mati de More Than Biking, uno de los responsables directos (además del Club Ojén Bikers, Aloha Bikes y el Ayto. de Ojén) de la buena organización del evento, quien estaba todavía azada en mano, dando forma al sendero de dicho tramo.

Este sendero se caracteriza por su elevada pendiente y su gran exigencia a nivel físico y técnico. No es una bajada de velocidad, sino de equilibrio y de "saber ir por el sitio". El terreno estaba "virgen", en el sentido más estricto de la palabra, ya que éramos los primeros que estaban rodando por él con nuestras "burras".
Foto cortesía de Jesús "Chipi"

Llegamos al TC2 (Cojolana) tras abandonar la pista de enlace. Éste es un tramo mucho más largo y rápido, con zonas de pedaleo y algún "semi-cortado" con el que no hay que despistarse debido a que se llega a ellos con cierta velocidad.

Para llegar el TC3 (Pecho Enebral), tenemos que subir por un cortafuegos al final de la pista de enlace. Bueno... Subir, no todos lo subimos. Chipi y yo "atajamos" por un empinado sendero con nuestras bicis a cuestas.
Otra buena foto de Chipi, mientras atajamos para llegar a lo alto del cortafuegos

Las vistas a la Villa de Ojén al noroeste, y el mar Mediterráneo y la costa de Marbella por el sur, desde el punto más alto donde comienza el tramo son espectaculares.

Se inicia la bajada por el cortafuegos para salir a un empinado y zigzagueante sendero, para luego continuar por un tramo muy técnico, sembrado de rocas y escalones (Rockgarden). Es una bajada que no te permite ni un sólo momento de relajación.

Al final del TC3, nos tomamos un descanso, mientras Chipi repara un pinchazo de su Fat Bike a la que algunos llamamos "Big Foot" 

Llegamos de nuevo a Ojén tras subir unas empinadísimas calles, para seguir subiendo más arriba del pueblo, hasta que enlazamos por un sendero cubierto de una densa y frondosa masa forestal compuesta por alcornoques, castaños, pinos, lentiscos y acebuches. 

Estamos en el Parque Botánico de El Cerezal, y éste es seguramente el tramo (TC4) más bonito de todo el recorrido. 
Un breve descanso antes de afrontar el último descenso del día

La bajada es técnica, con zonas de rampas pronunciadas, rocas húmedas y resbaladizas, raíces y tramos de pedaleo. Bastante física. En mitad del descenso atravesamos la conocida Casa del Cerezal, antigua vivienda de las familias de guardas forestales que actualmente se encuentra en estado de abandono. A diferencia de la clásica bajada de El Cerezal, ésta es una variante nueva que, efectivamente, estábamos estrenando.

Por fin, acabamos el recorrido del EAC. Muy técnico y exigente, en el que no sólo cuenta la habilidad del rider, si no también su condición física. Y es que acabamos realmente cansados. Y hambrientos! 
Nada como un buen trago de vino dulce de la tierra de Málaga antes de empezar a comer

Así que nos disponemos a invadir algún restaurante para "arrasar" con lo que nos pongan por delante. Era bastante tarde, más de las 4 pm, y parecía que todas las cocinas estaban cerradas. Suerte que nos topamos con el Restaurante El Castillo (el de Ojén, no el de Marbella), donde nos pusieron muy bien de comer y nos trataron como a señores. Así da gusto!

Por supuesto, volveremos a pasar por este precioso pueblo malagueño, ya que tenemos pendiente hacer la bajada de El Cerezal "Clásico" y el Juanar, que en palabras de nuestro amigo Beni, "esa bajada pone a cada uno en su sitio". Ya estoy mirando el calendario...

*Como siempre, aquí tenéis el enlace al álbum de fotos EndurOjén 

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Happy trails!



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Comentarios

  1. Muy bien! Aún no has hecho Juanar?!?! Pero que haces inconsciente! deja lo que estes haciendo y vete para allí ahora mismo!!

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    1. Je, je, je,... Lo sé. Pero es que el día no dio para más. Pero, bueno... Así tenemos excusa para volver otra vez en breve, que el Beni se me está "insinuando" one more time, y ya lo conoces...

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